Desde un tiempo a esta parte estan aflorando los datos de suicidios que ya superan con creces los muertos por accidente de tráfico, hemos colocado varios artículos referentes y parece que no es una locura nuestra sino que pese al silencio institucional el hecho es que la sociedad esta enferma y el desánimo crece junto a la soledad no deseada. La muerte silenciosa es un drama social que pone de manifiesto la enfermedad que pudre el sistema. Don José nos da unas claves para sobrevivir mas importantes que los diez mandamientos de los cristianos.
Nunca el concepto felicidad fue tan sencillo de comprender, y por tanto, de alcanzar. Ni la idea de libertad. ¿En qué nos estamos convirtiendo? ¿Es posible mudar el rumbo de la sociedad? El expresidente de Uruguay, José Mujica, con ese tono pausado, sabedor de "tenerlo todo en la vida" porque cada vez tiene más amigos, lo ha vuelto a hacer. El político uruguayo ha dado en Santander una lección de vida desde la humildad del que comparte su experiencia y no como un ejemplo sino como una arenga para buscar en uno mismo otra forma de ser y estar en el mundo, de cuestionarse.
Los alumnos del IES El Alisal han asistido a un ejercicio de honestidad moral que ha cuestionado los principios que rigen el sistema capitalista en el que vivimos. Él lo repite hasta la saciedad: "La felicidad no se compra en el supermercado". Parece una súplica. "Nada vale más que la vida y ningún bien material puede equilibrar".
La masificación de las máquinas
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Les va a caer la responsabilidad de navegar en un mundo que va tener cambios muy duros. Estamos en la puerta de una nueva revolución de trabajo que va a influir en toda la sociedad: la masificación de las máquinas inteligentes. Los robots sustituyendo al hombre en muchísimas tareas. Y el hombre luchando por el desarrollo de bienes públicos, por acortar la jornada del trabajo, por ganar ciertos derechos...y la economía con contradicciones. Los más lúcidos procurarán de que exista un salario básico porque las máquinas puede aumentar la productividad, pero no consumen. Y se necesitará que la gente tenga tiempo libre y capacidad para consumir.
"Estar vivos es un milagro"
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En 15 años llegó el mundo del 'telefonito'. Se están creando los cimientos de una cultura globalizada creciente. No sé si será mejor o peor, pero lo que nunca va a significar es la muerte de los localismos porque los hombres somos de algún lado, del lado donde se formó nuestra niñez. Los años de nuestra niñez nos sellan para siempre y son intransferibles. Somos hombres y mujeres de algún lado y eso queda acunado y estampado en nosotros mismos. Nuestro razonamiento puede llegar a ser bastante universal, nuestro corazón no. Hoy sabemos que la personalidad, en lo bueno y en lo malo, se empieza a gestar en la panza de nuestras madres y los primeros tres años de vida son intransferibles y lo que se pierde ahí no se gana nunca más. Por esto tenemos que recordar que estar vivos es un milagro. Nada vale más que la vida y ningún bien material puede equilibrar. La vida no se compra en el supermercado, la vida se está yendo.
¿Qué es la felicidad?
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Lo central de la felicidad es cultivar los afectos. Y los afectos los dan las cosas vivas, no las cosas inertes. Pero para cultivar afecto hay que tener tiempo. Y para tener tiempo hay que recordar que en nuestra vida tenemos que trabajar para vivir, porque el que no trabaja está viviendo a costa de alguno que trabaja. El que no trabaja, directa o indirectamente, está consumiendo el esfuerzo de vida que ha hecho otro.
Pero la vida no se hizo para trabajar. Hay que garantizarse el tener un tiempo libre para cultivar los afectos. ¿Cuáles? La familia, el cariño, los hijos, el puñado de amigos, el tener tiempo para mirar una tarde de sol o pescar una anguila en un arroyo.
¿Y la libertad?
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Ser libre significa tomar la decisión de usar el tiempo de nuestra vida en lo que se nos ocurre sin perjudicar a otros. Mientras tienes que trabajar para comer, ahí estás cumpliendo con una obligación por el hecho de estar vivo. Eres libre cuando tú eliges en qué gastas ese tiempo y ese margen, pero si no te aseguras ese margen, el mercado te puede robar todo el tiempo de tu vida porque te impone. Compra esto, lo otro... Si compras el autito tienes que comprar otro más grande y si tienes una casa en un balneario aquí, la quieres en Miami. ¡Así no paras nunca!
Recordando a Séneca
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"Pobres son los que precisan mucho", decía Séneca. Si no te pones un límite en la cabeza, el mercado te chupa la vida y puedes caer en la tontería de decir: "Yo no quiero que a mi hijo no le falte nada. Y resulta que le faltas tú". ¿No puedes perder dos horas para salir con tu hijo a jugar y caminar a la calle? ¿No tienes dos horas libres? Esa es la plaga de nuestro tiempo. Nos condena la soledad Sin rueda humana, sin intercambio, sin amigos, sin relaciones afectivas, sin querer... la vida no puede ser nunca feliz.
Suicidios: "Algo pasa"
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La mayor cantidad de muertos son los suicidios. Superan a los de todas las guerras en el mundo actual. Hay más muertos por suicidio que la suma de los muertos de la guerras, más la suma de todos los homicidios del mundo. ¿Por qué el hombre es el único animal que atenta contra su propia vida? Algo pasa. Si la vida es el mayor valor, atentar contra la vida significa que la vida se nos trasformó en una carga, en una negación, en un sacrificicio. Algo está fallando y este es un problema cultural. No es problema de riqueza o pobrea, sino de felicidad.
El beneficio de estar 15 años entre rejas
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Puedes estar encerrado, tu cuerpo, pero todavía no pueden encerrar tu cabeza, tu imaginación, tus sentimientos. Y buscas algún rasgo de vida, puedes observar que las hormigas gritan. No me creen, pero si agarras una hormiga y la miras de cerca verás que grita. Y si te dejan leer puedes construir un mundo. El tiempo que estuve preso fue tal vez en el que más aprendí. Allí fui descubriendo cosas que me fueron cambiando la manera de ver. Por eso no tengo ningún mérito, el mérito es de las circunstancias. Si no hubiera vivido esa peripecia tan dura no hubiera recibido tanto beneficio. Por eso se aprende más del dolor que de la bonanza. Y por eso defiendo la vida e invito a la gente a tener coraje de vivir. No significa no tener dolor, sino superarlo y sacar partido de cada frustación.
"Trump pasa, pero la gente queda"
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El problema no es trump, es la gente que lo sigue, que es mucha. Lo que establece una patología en la sociedad americana porque Trump de alguna forma va a pasar pero la gente queda. Por supuesto, yo tampoco tenía esperaza desmedida en Clinton, que no es una carmelita descalza tampoco. Son versiones distintas de lo mismo. Lo que pasa que las repercusiones de las políticas de Trump pueden ser dramáticas, pero esperemos que sea un poco demagogo y haga otras cosas y no las que prometió.
Pobre y rico
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Algunos dijeron que fuí un presidente pobre. Yo no soy pobre, soy sobrio. Aprendí a vivir con lo necesario. Lo justo, para tener tiempo libre y dedicárselo a las cosas que me conmueven. Hay que razonar y sacar las cuentas al sentido de utilidad. Para nosotros pobre es el que no tiene comunidad. Y yo cada vez tengo más amigos en el mundo. Cada vez estoy menos solo, y esa es la mayor riqueza que se puede tener en la vida.
El peor mal
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La gente deja de creer en la gente. El peor mal para un pueblo es no tener esperanza, no creer en algo. Y nuestra enfermedad contemporánea es que tendemos a no creer en nada y por eso nos semienamoramos de una camisa, un auto, una marca, de cualquier cacharro, de cualquier porquería... esta es la crisis más grave. Reflotar ese nivel colectivo de amor a la vida me parece esencial.
A ustedes les va a tocar vivir un mundo distinto. Y tendrán la responsabilidad de luchar en él. No va a ser una hamaca paraguaya que se mece con el tiempo. No. La vida es lucha. Todo progreso social siempre costó una lucha. Desapareció la esclavitud porque hubo gente que luchó, las ocho horas de trabajo, la jubilación... todo progreso humano significió que hubo gente que luchó colectivamente. Así ha sido desde la antigüedad.
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